El Chelsea recibe hoy al Galatasaray en la vuelta de los octavos de final de la Liga de Campeones, un encuentro en el que el marfileño Didier Drogba volverá a pisar Stamford Bridge por primera vez desde que dejó los blues en 2012.
Los de José Mourinho parten con la leve ventaja del 1-1 logrado en Estambul, si bien tendrán que defenderse de los ataques de Drogba, el héroe de la final del torneo continental de hace dos temporadas, la única que ha ganado el Chelsea.
El marfileño abandonó el club inglés tras marcar el penalti decisivo con el que el equipo londinense batió al Bayern Múnich en el Allianz Arena y todavía es uno de los futbolistas más apreciados por los aficionados de Stamford Bridge.
El Niño de arranque
Ante el Galatasary, Mourinho contará con el español Fernando Torres, que el fin de semana recibió la luz verde para disputar el encuentro de liga ante el Aston Villa en el que los blues cayeron por 1-0 y estará listo para enfrentarse al equipo turco.
El Chelsea sigue pendiente sin embargo del estado de la rodilla del lateral zurdo Ashley Cole y de las molestias en los aductores del central brasileño David Luiz.
Salen con todo
Optimismo moderado, pero tensión por una modesta racha de resultados en la liga local -cuatro empates en los últimos partidos fuera de casa- marcan al Galatasaray.
Tres de los jugadores más importantes, el defensa Semih Kaya, el centrocampista holandés Wesley Sneijder y el portero uruguayo Fernando Muslera, figura irreemplazable para muchos seguidores, sufrieron ligeras lesiones en el partido del viernes pasado contra el Karabükspor, pero han viajado a Londres y podrían jugar.
En casa se tuvieron que quedar Hamit Altintop y Emre Çolak, por lesiones, pero su ausencia no parece, de entrada, debilitar el equipo otomano.