“El fútbol es un deporte que inventaron los ingleses, juegan once contra once, y casi siempre gana Alemania”, fue una frase que mencionó el exdelantero inglés Gary Lineker en 1990. Ese mismo personaje, molesto aquella vez porque su selección había perdido en semifinales con Alemania, no se volvió a enfadar tanto hasta hace unos días, en el que Inglaterra fue eliminado de la Eurocopa 2016 por Islandia. “La derrota más vergonzosa de nuestra historia. Inglaterra ha sido superada por un país con más volcanes que jugadores profesionales”, fue la frase que soltó el máximo goleador inglés en la historia de los mundiales. Eurocopa 2016.
ESCRIBE: RENZO DULANTO ZUBIATE
Pero lo que dice Lineker es verdad. Que la selección de Islandia esté en cuartos de final de la Eurocopa 2016 de Francia, siendo esta la primera participación internacional en su historia, no es un detalle menor. Es una sorpresa que duele, que va a quedar en la historia del fútbol. Eso sin duda.
Situación increíble
Y es verdad que en Islandia hay más volcanes que futbolistas profesionales. Es verdad lo que dicen otros, que hay más ovejas que habitantes (332,500), y también es verdad que muchos de sus futbolistas, además de desarrollarse como deportistas, tienen otras profesiones. Por ejemplo, su entrenador, Heimir Hallgrimsson, fue dentista hasta que se hizo cargo del equipo junto a Lars Lagerback.
La historia grande de la selección nórdica comenzó el 3 de setiembre de 2015. En ese glorioso día, Islandia le ganó 0-1 a Holanda en su propia casa con un tanto de Gylfi Sigurdsson, jugador más reconocido mundialmente en la actualidad. Tres días después, los islandeses consiguieron su cometido y, pese a empatar sin goles con Kazajistán, clasificaron a la Eurocopa 2016, a falta de dos fechas para que culminen las Eliminatorias para este torneo.
Luego empezó la preparación para la Euro. Las continuas derrotas en los amistosos previos al torneo europeo daban para pensar que Islandia no podía llegar lejos, ni siquiera pasar la primera ronda. Pero el trabajo de la dupla técnica dio frutos. El sueco Lars Lagerback y el islandés Heimir Hallgrimsson trabajan juntos como entrenadores del equipo desde 2011 y desde ahí han desarrollado un fútbol ordenado, con mucha disciplina táctica, solidez defensiva, con un rendimiento físico notable y con atrevimiento para atacar en situaciones específicas.
Debut soñado
Eso se notó en el debut ante Portugal. Mil veces favoritos los lusos, se sorprendieron con una Islandia que supo plantarse bien en defensa y que los desesperó durante varios minutos. El gol de Nani a los 31 presagiaba una victoria fácil para Cristiano Ronaldo y compañía, pero esto no fue así. A punta de inteligencia, los escandinavos igualaron a través de Birkir Bjarnason; consiguiendo así el primer gol y el primer punto en una competencia oficial internacional para los islandeses.
Hungría era la segunda prueba para los dirigidos por Lagerback. No era el ‘cuco’ como Portugal, pero los islandeses no podían verlos por encima del hombro. Gylfi Sigurdsson anotó de penal a los 39’ y cuando parecía que era triunfo para el cuadro azul, un autogol del defensa Sevarsson puso en duda la clasificación a octavos de final.
Y en el partido más complicado y con más presión, Islandia tuvo cabeza fría y corazón caliente para ganarle 2-1 a Austria y avanzar a octavos de final. Jon Bodhvarsson puso el 1-0, pero los austriacos empataron por intermedio de Alessandro Schopf. Sin embargo, en el minuto 94, apareció Arnor Traustason para darle una alegría desmedida a sus hinchas. Islandia estaba en la siguiente ronda.
Vikingos superiores
En octavos de final se midió con Inglaterra. Otra vez, Islandia era definitivamente favorita para irse a su casa. Y más con el tanto de penal que marcó Wayne Rooney a los cuatro minutos. Quedaban 86 para que los ingleses metan más goles, seguramente pensaron muchos. Pero Sturridge, Kane, Hart y Sterling, jugadores que la rompen semana a semana en la Premier League, no fueron suficientes para frenar a Ragnar Sigurdsson, que marcó el empate a los seis minutos, ni a Kolbeinn Sigdorsson, que anotó el gol triunfal para los escandinavos.
A Islandia se le viene otro partido en el que será totalmente inferior: el domingo frente a Francia; pero los vikingos ya demostraron que no se les puede mirar por encima del hombro.
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